Entre las metas y las prisas

Cuanto pierdo cuando gano una meta? cuanto gano cuando pierdo otra mas? a veces nos enojamos porque las cosas son de tal o cual forma: el trafico lento, nuestro auto lleno de polvo, la crisis económica o los diputados corruptos...

me enojo con el trafico pues mi meta es llegar mas rápido, mas pronto; siempre manejo con prisas y me enojo y le grito a la vieja panzona que se atravesó la calle sin ver que el semáforo ya había cambiado a verde para mi, y le sueno el claxon o cuando menos la miro feo, que sienta que estoy enojada con ella! y de repente la vieja panzona gira la cabeza y sonríe mientras dice "Dios te Bendiga" y sigue con paso trabajoso su camino.

Dios te bendiga!! tarada, ni se imagina que yo ya estaba pensando en su madre... o tal vez por eso me lo dijo, para darme algo bueno por lo malo... y entonces me fijo en que la embarazada ya llego a la banqueta y que se ve bonita sonriendo con su blusa rosa y verde y las mejillas coloradas, mientras el carro tras el mio suena el claxon como loco y probable mente mi madre ya salio raspada un par de veces.

Entonces un milagro pequeño ocurre en mi automovil: en lugar de enojarme y responder al conductor de atrás, comparto el regalo que me acaban de dar: Dios te bendiga, digo sonriendo con dificultad al principio pero después sinceramente: Dios te bendiga, y sigo mi camino esperando que también me bendiga a mi, como la embarazada dijo que lo haría, y llegar tarde, mi carro sucio, la economía y los diputados corruptos pierden prioridad en el orden de mis pensamientos, al menos por esta mañana.

Al final fueron solo un par de minutos tarde, pero mientras me encaminaba a la oficina iba pensando en que si se hubiera cumplido mi meta de llegar a tiempo gracias solo al trafico rápido, me hubiera perdido de la bendición y de la reflexión.

No digo que se deba llegar tarde u olvidar las metas, claro que no! Tal vez deba ponerme la meta de llegar temprano SALIENDO de casa mas temprano, y aprovechar para observar mis alrededores, a las personas sonrientes, el semáforo nuevo, las palmeras plantadas en el camellón.

Ya se que es una comparacion simplista, que las metas son importantes y blabla, pero quien nos dice si una meta perdida en un momento dado, pequeña o grande, no necesariamente es algo malo? tal vez es solo que la vamos a obtener un poco mas tarde y mas bendecidos. A final de cuentas como decía un poster que leí en alguna parte hace ya un tiempo, pero que no entendí en su momento: la felicidad no es un destino, es el camino. Creo que ahora entiendo un poco mas de que se trataba...